martes, 16 de abril de 2013

Escribir



Ayer una lectora me preguntó como iba el nuevo libro y cuando estaría acabado. Parece una pregunta simple pero en realidad es complicada. A veces escribo paginas de un tirón y a veces pasan días en los que lo que escribo no tiene mucho sentido y lo dejo en una carpeta esperando a que madure, a que coja vida o a que se pudra, porque la primera impresión era la correcta y no servía para nada. No tengo ni idea de cuando lo acabaré, quizás en pocos meses o quizás tarde mucho más tiempo. Tampoco se si será publicado, porque eso depende también de cómo se venda Caminos de sumisión y aunque las criticas de los lectores sean muy buenas, las ventas no son precisamente alentadoras.
Hay cosas que no se pueden controlar y con las que hay que saber vivir. De momento intento disfrutar de escribir o incluso del a veces desagradable placer de escribir, cuando las cosas no salen bien y una frase o una situación se niega a parecer natural y a no ir a su sitio correcto. Me gusta jugar con las palabras, me gustan dominarlas, llevarlas a su sitio… ¿de qué me suena esto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario